- Una comida disfrutando de la liturgia y la pasión del gran cocinero #Daniel Garcia #restaurante Zortziko,
- la compañía de un buen amigo,
- una sobremesa “con contenido”,
tres momentos que recuerdo por separado de aquel día.
Llevaba conmigo un articulo, el cual me comprometí en enseñar un par de meses antes. Era una entrevista a grandes cocineros del mundo, se les preguntaba por lo que comerían en su ultima cena. Curiosamente, coincidía que cuanto mas edad tenían los cocineros (Bocuse, Gagnaire…), sus sugerencias eran mas simples. Esta claro que todos buscaban una esencia y un sentido a lo que elegían, pero de una tortilla francesa cocinada en casa, o mucha comida y una bacanal con amigos, a pedir traer un arroz de oriente y seleccionarlo grano a grano…, hay una diferencia. Cuento esto no con la intención de menospreciar ningún deseo, (esto es algo muy personal, tu ultima cena –imagínate-…), pero si porque acompañó un momento de la sobremesa.
Considero que lo que puede suponer para un cocinero la elección de la comida en un menú (además de su ritmo, puntos de sal, discurso, cantidades, contrastes, composiciones…), para un interiorista podría ser el manejo de la luz en una casa. Como interiorista me interesa mucho este momento (noche-dia//luz y sombra), Hay otras partes no menos importantes también en un proyecto de interiorismo. Analizar el programa y la distribución del interior, tratar de entender las necesidades del cliente…, pero hablando sobre la iluminación en un proyecto, de la necesidad de no tratar de convertir en día la noche, ni una zona de sombra en luz, Daniel me hizo un enorme regalo. Un libro lleno de inspiración con el cual me identifico e invito a su lectura, una oda al manejo de la sombra y al contraste de la luz. Una reflexión de Junichiro Tanizaki que escribió hace años, y que puede acompañar este presente, en el que el mercado esta lleno de “imputs” que justifican la cantidad de luz y consumo eléctrico, tonos de luz, virguerías de aparatos… y nos alejan del SENTIDO. Es un cuaderno pequeño y lleno de emociòn.